Por: debbie lynn elias
Makinov es un maestro de la manipulación. Un director de fotografía bielorruso que hace su debut como director con COME OUT AND PLAY, una reimaginación del chiller de 1976, ¿Quién puede matar a un niño? , para proteger su anonimato, incluso de sus actores, Makinov siempre está envuelto en una capucha/pañuelo rojo. Nadie lo ha visto ni sabe quién es. Gracias a una serie de videos virales, Makinov ha arrojado algo de luz sobre su visión del mundo y su proceso creativo de realización cinematográfica. Los “manifiestos” son fascinantes.
Al emitir una declaración del director sobre COME OUT AND PLAY, Makinov declara: “No tengo ningún interés en promocionarme a mí mismo. Es por eso que uso esta cosa en mi cabeza. Quiero hablar de mis ideas. Desde hace un tiempo me he sentido desgarrado y disgustado de ver la estúpida vida moderna. Nos confundimos con lo que realmente importa. Debemos recordar que estamos hechos de sangre. Un viejo proverbio dice que es mejor matar en tiempo de peste. Yo diría lo mismo cuando hablamos de cine”.
Su misma aura envuelta en misterio gracias a su sudario rojo, sus manifiestos y COME OUT AND PLAY, como con su película, el propio Makinov me hace querer saber más, más sobre él y la película. En esta entrevista individual exclusiva y sin restricciones realizada por correo electrónico, Makinov habla sobre COME OUT AND PLAY y el poder del rojo.
Eres un maestro en la manipulación con COME OUT AND PLAY. Es imposible apartar la mirada de la pantalla mientras la historia, el diálogo mínimo, pero la creación efectiva de tensión atrae al espectador a la historia. Tengo entendido que la película está basada en la novela de Juan José Planes para la que ya existía la película española de 1976, ¿Quién puede matar a un niño? , hecha. ¿Cuál fue su atracción por la novela y/o la película de 1976?
La novela tenía un concepto central muy interesante de niños que se vuelven contra los adultos. Tenía algunos problemas inherentes a su forma literaria, pero para una película la idea principal funcionó como una gran premisa y la tomé para hacer el guión de la película.
¿Cómo empezaste a escribir tu adaptación de guión?
Miré el formato del guión y traté de emularlo usando el libro como fuente. Lo que terminó pasando por varias razones es que ni siquiera usamos un guión, los actores no sabían lo que iba a pasar después, ni algunos miembros del equipo. Eso ayudó a crear la inmediatez y la crudeza que hay en la película.
Cuando haya desafíos particulares al escribir la adaptación, adiciones, eliminaciones, etc., de la novela y para distinguir su película de ¿Quién puede matar a un niño? ?
El libro de Juan José Plans se preocupa por exponer a los adultos como pecadores y se pasa un poco justificando todo lo que sucede. Con el cine no hace falta dar explicaciones, las cosas suceden en tiempo real y el público, si la película es buena, se lo toma todo como viene. Así que la película tenía que ser muy simple y mínima, sin explicaciones, esto está pasando y eso fue todo.
Esencialmente una “banda de un solo hombre” como escritor/director/editor/director de fotografía, ¿era esta su intención desde la concepción del guión?
No pensé que iba a obtener ayuda para hacer esto, así que lo concebí desde el principio como un espectáculo de un solo hombre. También hice la música.
Sabiendo que esto sería más o menos su espectáculo de un solo hombre, al escribir el guión, ¿estaba pensando y/o trabajando en sus imágenes al mismo tiempo?
Las imágenes siempre son lo primero. La forma en que trabajaba antes era yo, la cámara y el sujeto, por lo que las imágenes eran el resultado inmediato y la principal preocupación. Con esta película tuve que adaptar mis métodos, pero lo que más me interesa es la parte visual.
Tienes un gran contraste en el tono visual y la paleta de colores de COME OUT AND PLAY. Maravillosa yuxtaposición convincente de color. ¿Cuáles fueron sus consideraciones al diseñar la paleta visual de COME OUT AND PLAY?
La locación nos dio los tonos azul claro del mar y la arena blanca, y también las noches muy oscuras que ves en la película. Quería que el blanco y el brillo en general funcionaran como un elemento de horror, algo que rara vez se usa, pero creo que hay una cualidad esquiva en el blanco que, cuando se asocia con algo horrible, lo hace aún más efectivo que el color de la sangre o la oscuridad de la noche.
¿Qué te llevó a elegir a Vinessa Shaw y Ebon Moss-Bachrach como Beth y Francis, respectivamente?
Los actores principales llegaron por recomendación de Pablo. Nunca los había conocido antes, pero después de hablar con ellos supe que podían interpretar a los personajes que necesitaba para que la película funcionara.
La ubicación es hermosa. ¿Dónde rodaste esta película?
La Isla Holbox en el estado de Quintana Roo, México.
¿Cuánto duró su rodaje y, posteriormente, su proceso de postproducción?
El rodaje fue de tres semanas, la publicación fue de seis meses.
¿Qué formato usaste para disparar? ¿Digital? ¿Película? Y dada la hermosa apariencia de la película, ¿qué tipos de lentes se usaron?
Digital. Lentes ultra prime, de 20 mm a 80 mm, en su mayoría de 50 mm y un zoom para una sola toma, creo.
El rojo es un color importante para ti. Ya sea con colores puntuados en su película, o con su propia cara con un pañuelo rojo mientras filma. ¿Qué te habla del color “rojo”?
El rojo es el color de la sangre y también del alma.
¿Cuál es el mayor regalo que te da el cine?
Trato de no tomar del cine ya que va en contra de la naturaleza del cine, un monstruo que solo toma.
¿Qué te llevaste personalmente o aprendiste sobre ti mismo al hacer esta película?
Prefiero quedármelo para mí.
#
Manifiesto Makinov
SAL Y JUEGA – Reseña de la película